Hacer Avenida Brasil le costó a la red Tv Globo $us 45 millones, pero la telenovela recaudó $us 1.000 millones en publicidad y es, según la revista Forbes, una de las producciones más exitosas de la historia de la Tv. El 9 de diciembre Unitel estrenará esta historia en Bolivia, a las 21.00.
Fueron siete meses en los cuales la audiencia en Brasil estuvo en vilo para descubrir cómo Nina se vengaría de Carmen en Avenida Brasil. El teledrama congregaba a 46 millones de televidentes cada noche, señala forbes.com. Además de que la audiencia ansiaba saber quién mató a Max, uno de los personajes centrales.
Avenida Brasil se emitió el año pasado y es una de las producciones más rentables de la productora Tv Globo. Su éxito valía tanto que la empresa P&G llegó a pagar $us 400.000 por 30 segundos de publicidad en los siete meses de emisión.
Uno de los puntos que convirtió a la trama de 180 episodios en la favorita de 46 millones de televidentes que vivían en Brasil fue que era como un espejo. Por primera vez los protagonistas no eran lo millonarios que viven en lujosas mansiones. La trama apuntó a la clase media, esa que se empoderó con la llegada a la presidencia de Lula da Silva.
“Lo importante era retratar el ascenso de la clase C, que fue posible gracias al crecimiento económico sostenido de la nación durante el gobierno de Lula y el de su sucesora Dilma Rouseff. Este estrato se incrementó con más de 30 millones de brasileños que antes se encontraban en pobreza extrema”, explicó Joao Emmanuel Carneiro, escritor de Avenida Brasil, al portal lanacion.com.ar.
Uno de los personajes es Tifón, quien junto a su familia son algo así como la realeza de un barrio marginado llamado El Divino, que lo adora por ser un crack del fútbol y un millonario que no quiso dejar su barrio. Vive aún en el lugar, comparte con la gente, pero cae en la telaraña de Carmen.
La historia de los pobres ricos es protagonizada por Debora Fallabella (Nina), Caua Reymond (Jorge), Murilo Benicio (Tifón) y Adriana Esteves (Carmen), esta última es la villana y alcanzó la fama y odio absolutos en su nación.
El último episodio se emitió en Brasil el viernes 19 de octubre y tal como señaló la agencia AFP, “paralizó al país”. Hasta la presidenta Rousseff tuvo que modificar su agenda y adelantar su participación en un acto de apoyo a Fernando Haddad, candidato de su Partido de los Trabajadores (PT) a la Alcaldía de San Pablo. Su equipo mandó a instalar pantallas gigantes para que la gente no se pierda el final del teledrama.
Incluso se temía que tantos televisores encendidos al mismo tiempo, durante el final, provocaran un apagón y se desarrolló un plan de contingencia para solucionarlo. La revista Veja de Brasil, que se caracteriza por tocar temas políticos, le dedicó al episodio final su portada en agosto de 2012, titulando Venganza. Más de 100 países compraron la telenovela para emitirla; fue doblada en 14 idiomas y nominada al Emmy internacional. Televisa quiere comprar los derechos para hacer su versión.
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